Azawakh - Lebrel africano

Los perros sueñan. Lo documenta este video: http://www.youtube.com/watch?v=ZB5K6kEWK3w

¿Qué es un sueño? Wikipedia dice: “Los sueños son una serie de imágenes, pensamientos, sonidos o emociones que pasan por la mente cuando uno está dormido. El contenido y el objetivo de los sueños no se ha explicado a fondo, a pesar de haber sido el tema de especulaciones e interés de muchos durante la historia….“

Un artículo sobre el sueño de los perros se encuentra en la siguiente página: http://www.guiadog.com/clinica/los-suenos-del-perro.html

En una página web dedicada a la psicología se dice:

… La pregunta frecuente es: ?Sueñan los animales?  Los que tienen perros de razas en las que la crianza no haya suprimido los instintos de cazar, sabe como su perro“caza“ al estar dormido: estira el cuello, sus patas se mueven, el animal hace todo tipo de sonidos. Todo aquello se parece al sueño humano (paradójico, la fase REM). Se puede decir de los mamíferos en general que sueñan (todos los mamíferos tenemos la dura madre organizada de la misma manera compleja de seis capas).

Sin embargo, ningún animal nos ha hablado, no se ha dirigido a nosotros diciendo: "Escucha, te contaré con qué soñé anoche...".

Me atrevo a estar en desacuerdo en este punto. Mi perrita se dirige hacia mí y me cuenta sus sueños. El hecho de que tengo una capacidad muy limitada de entender sus “palabras“ es problema mío, no suyo.

Todos los perros que hemos tenido han soñado exactamente así cómo describen los artículos arriba mencionados. Pero en ningún caso pude ver que el sueño los dejara impresionados de alguna manera después de despertarse, así como sucede con las personas que tienen la capacidad de contar sus sueños. Nunca fui testigo del hecho que las emociones provocadas por el sueno se reflejasen en el comportamiento del perro después de despertar. Sí, estoy hablando de características fisiológicas que se pueden medir objetivamente, como el latido acelerado del corazón, respiración agitada, el pelo queda erizado por un largo rato incluso cuando el perro está ya despierto…

Akhami es un animalito con un alma extremadamente sensible, hasta hipersensible. Todo lo que hace lo hace con todo el corazón, viento en popa; mi perrita no sabe hacer nada a medias. Es mi pequeña mentalista. Es capaz de advertirle a uno que le va a dar un ataque de migraña. Que dentro de un par de días, a uno se le desarrollará un herpes en el labio… que su Papá Tari volverá a tener problema con la pata… yo fui testigo de cómo con su hociquito largo exploraba la parte del cuerpo donde una persona tenía un tumor maligno… era de miedo… Si, esta perrita es una mentalista y mucho más. Si fuera menos tímida con la gente extraña y si yo fuera más consecuente con su educación, seguramente sus capacidades se podrían aprovechar. Sin embargo, esta sensibilidad, a pesar de ser seguramente muy interesante, trae sus ventajas y desventajas. Cualquier experiencia negativa, ni siquiera tiene que tratarse de algo verdaderamente serio, afecta a Akhami mucho más de lo que suele afectar a otros perros. Su percepción del mundo es muy emotiva y las emociones turbulentas de mi Akhami también se reflejan en sus sueños.

Los sueños de Akhami suelen ser bastante pintorescos. Sueños de acción. Pesadillas. Su camita queda cerca de nuestro dormitorio y yo tengo un sueño muy ligero, por eso me despierto enseguida cuando mi perrita empieza a sonar en voz alta. Sus patitas se mueven, Akhami ladra, gruñe, aúlla… Así continúa soñando unos minutos, pero al cabo de un rato Akhami despierta, salta de su cama y se oye el eco de sus pasos, acercándose. Asoma su cabecita por la puerta abierta. Me vuelve a ver, como llamándome, y regresa corriendo a su cama. Allí, enrollada y con la cabecita levantada, espera hasta que yo llegue donde ella. Me siento a su lado, la abrazo, la acaricio. Mi Akha, toda erizada, tiembla, resopla, su corazón latiendo aceleradamente, y a veces suele “contarme“ en voz bajita su sueño. Me quedo con ella, nos susurramos una a la otra, hasta que Akhami comienza a tranquilizarse. Su pulso y respiración vuelven al ritmo normal, ya no está erizada. Al cabo de un rato se calma y vuelve a dormirse.

He tratado de analizar si sus sueños de alguna manera se vinculan a lo que Akhami ha vivido durante el día, si sus sueños reflejan experiencias recientes. A veces sí, a veces no. He llegado a la conclusión que en el caso de mi perrita juegan un papel importante también las hormonas, ya que ella sueña sus sueños  más cargados de emociones después de haber estado en celo. Sin embargo, en muchos casos tales sueños llegan cuando menos se lo espero, aparentemente sin razón. Pero eso es mi punto de vista, el punto de vista humano. Imperfecto.

¿Entonces qué pasa cuando los perros y los humanos soñamos? ¿Qué es un sueño? Quién sabe…

Yo sueño que estoy aquí,
destas prisiones cargado;
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

Pedro Calderón de la Barca: La vida es sueño